domingo, 15 de junio de 2008

¡Qué grande te queda la celeste y blanca!

Después de un semestre pálido en el ámbito de competencia de clubes, creía que Juan Friomán "Pechohelado" Tristelme no iba a ser convocado a la Selección. Sus más acérrimos agentes de propaganda apenas pudieron rescatarle un gol contra Independiente en el Clausura 08 (a la vez le adjudicaron toda la responsabilidad en la remontada que llevó a los boquenses al empate con uno menos), un gol contra Maracaibo, y la buena actuación en la ida contra Fluminense. Buena actuación que se vió reflejada en sus dos tantos, mas que no pudo ser aplicada en su mote de conductor, ya que esa noche helada, el Capitán Frío se paro bien de punta.

El resto fue muy poco. Quisieron maquillar partidos pobres con apariciones mágicas en forma de un pase preciso en el minuto 32 del primer tiempo, con la cual Boca ganó un corner. O incluso quisieron decir que el gol clásico contra River de Sebastián Battaglia, fue una invención suya. En lo personal, creo que fue el gol 829 que vi después de un corner pateado al centro del área, y conectado al gol por un cabezaso compañero.

Pero a pesar de sus esfuerzos, los agentes propagandísticos y sus fans dejaron todo en un "No fue su etapa más brillante, pero igual fue clave". Boca Juniors quedó eliminado de la Copa Libertadores, pero me animo a decir que este equipo sin corona fue superior a varios equipos boquenses campeones continentales. El fútbol es así, y no siempre gana el mejor. Ahora bien, Tristelme poco hizo para que Boca juegue así.

Por mi parte -y por parte de muchísimos hinchas ajenos a las voces propagandísticas- creí que esta vez no había manera de maquillar la convocatoria de este invento del periodismo a la Selección. Encima, con la lesión fantasma (aquí he escrito al respecto en algún comentario) en boca de todo el entorno tristelmista, verdaderamente pensé que esta vuelta zafabamos.

Pero evidentemente los que zafaron fueron los ecuatorianos. Porque vinieron a plantarse con dos líneas de cuatro, prolijitos, correctos, a una cancha con un invicto de casi 30 partidos y 15 años; y se encontraron con una celeste y blanca de 10 jugadores + Tristelme. Y si señores, este pseudo conductor, al cual le arman el equipo a su antojo, depende pura y exclusivamente de una pelota parada para intentar meterla.

El verso de su gran conducción, cada día carece más y más de sustentos reales. Los ecuatorianos fueron inteligentes, no le dieron a Argentina espacio para patear tiros libres peligrosos (al menos no demasiados) y asi automáticamente dejaron al equipo con uno menos. Encima, el fenómeno de Basile se empecina en juntar distribuidores de juego, y a nadie que pique al vacio.

Así y todo, con Tristelme en cancha, antes del partido creí que ganaríamos, no demasiado cómodos pero ganariamos al fin. A los 15 del segundo tiempo pensé seriamente que se podía perder. A los 45 del segundo ya dí por hecha la derrota. Con toda la suerte del mundo, Palacio recibió unos rasposos cabezasos, le pego de punta al medio y se le escapó al arquero.

Empatamos. Nada más ¿Nada más?

No señores: A este ritmo, esta selección se clasifica. Pero a este ritmo a Semifinales en Sudáfrica no llegamos ni soñando. Y de Oro en Beijing menos. ¿Por qué sigue jugando como manija estelar del equipo un tipo que con 50 partidos nunca demostró su capacidad de conducción en el seleccionado?

Basta de la mentira, Tristelme. Basta por favor.

viernes, 28 de marzo de 2008

Un elenco de sobra

Vibrante encuentro el de anoche entre Boca Jrs y Colo-Colo. Los locales lograron imponerse al final por 4-3, aunque se encontraron dos veces por debajo en el marcador. Para destacar, la enorme voluntad de los de Ischia, que con uno menos fueron siempre al frente. De tanto ir, tuvieron recompensa y ganaron, apoyados en la soberbia actuación de Palacio y en la polémica capacidad de Palermo (erró un penal horriblemente y al minuto facturó dejando la vida en una jugada), sumada al buen desempeño del equipo en general.

Boca ganó porque fue local, porque tiene jugadores de enorme categoría, porque tiene historia. Y atención, porque enfrente no estaba el Cucuta, sino un Colo-Colo interesante que a pesar de tener uno más, mostró querer ganar el encuentro en una cancha que es complicadísima.

Una vez más queda evidenciado que Friomán es un actor importante en el elenco boquense, pero que no es el único. Boca tiene argumentos de sobra para ganar, y lo viene demostrando en estos partidos sin el Capitán Frío.

Les dejo una pregunta ¿Si Gracián sigue así, debería dejar el puesto a un jugador que no viene mostrando todo su potencial en cancha?

Saludos y ojalá haya partidos como los de anoche más seguidos. Los amantes del fútbol, agradecidos.

jueves, 27 de marzo de 2008

Con la camiseta

Argentina jugó contra un equipo con 11 camellos y ganó cómoda 2-0. Digámoslo concretamente: de 10 partidos contra seleccionados clase B o C, solamente con la camiseta la "albiceleste" gana por lo menos ocho. Y sin mucho esfuerzo. Hoy se le ganó a estos muchachos y sirve para sumar minutos, para buscar el equipo, para acumular confianza.

Lo bueno sería que este plantel, con este esquema sume más partidos y así se enfrente contra alguna potencia. Brasil, Italia, Alemania, por que no Holanda. Y entonces empezaremos a tener un mejor termómetro de donde estamos parados.

Está claro que la ausencia del Capitán Frío hoy fue anecdótica. Con él en cancha ganabamos igual. Pero acá lo importante es armar otro equipo, una variante que no dependa de sus helados pases atrás, de su fatigoso andar, de su frío temple.

Porque ya está demostrado que con Rigayme en cancha, a Perú le ganamos fácil. Pero cuando las cosas queman, cuando enfrente hay un equipo con gloria acumulada, Argentina pierde. Y pierde porque a su conductor se le cae la bombachita.

domingo, 23 de marzo de 2008

Y la vida continua

Un Boca plagado de ausencias venció con lo justo al pobre Colón de Santa Fe por 2-1. Un partido que desde la previa se presentaba sencillo para los locales, y que terminó siéndolo finalizados los noventa minutos. A pesar de la justicia del resultado, a pesar de lo tranquilo del trámite, los de Ischia no tuvieron un gran despliegue. Les faltó chispa en los metros finales y recuperación en el medio. La pobre versión "sabalera" que se presentó hoy en "La Bombonera" llegó a pisar varias veces el área local en el segundo tiempo. No cuesta imaginar a un equipo más filoso, que seguramente hubiese transformado alguno de estos avances en gol.

Pero ni todos los errores sumados a todas las suposiciones pueden empañar la justa victoria boquense. Surgen preguntas entonces ¿Cómo puede ser que Boca gane más allá de Tristelme? ¿Es posible ver al equipo de La Ribera ganar un partido sin despeinarse, sin la helada presencia de Friomán?

Es que justamente Boca gana más allá de un jugador. Y esto es -vaya paradoja- a partir de la riqueza de jugadores con las que cuenta en su plantel. Veamos: Sale Friomán, entra Gracián. Leandro no está en gran nivel, no tiene continuidad y se encuentra un escalón por debajo del dueño del puesto. ¿Pero cuantos equipos cuentan hoy en la Argentina con un Gracián? Está misma lógica puede ser aplicada a otros reemplazos, por citar alguno, el de Palacio-Castromán.

Con este equipo lleno de suplentes, dió la sensación que Boca le perdonaba la vida al alicaído rival y le vendía la derrota al módico precio de 2-0. Y era lógico, porque el equipo de suplentes que puede presentar Boca es superior a muchos equipos titulares de otras instituciones. ¿Qué pasaría si este equipo tuviese el ruedo que tiene el equipo titular?

No vamos a hacer futorología, pero convengamos que la victoria de hoy fue más cómoda que la que los boquenses obtuvieron contra otros equipos que vienen peleando el descenso (San Martín, Gimnasia). Por eso nada nos haría suponer que con todos los titulares, la historia hubiese sido muy distinta.

Tristelme juega bien. Tiene virtudes y defectos, pero nadie niega lo que ayudó con su juego en Boca. Lo que si queda en duda es esa sobrevaloración que se le da. Algunos medios importantes preguntaban ¿Cómo se podrá reemplazarlo?

No es Tevez o Rojitas muchachos... Es Riquelme. Ni más ni menos.

viernes, 21 de marzo de 2008

Noche sin estrellas

Boca perdió 0-2 ante el Colo-Colo en Chile. Sin embargo hizo méritos para acortar distancias y hasta para empatar el trámite. Sucede que existen días en los que todo parece costar el doble, y a pesar de que los de Ischia crearon varias situaciones, no pudieron trasladarlas a la red. Faltó siempre la última puntada, mientras que a los trasandinos todo les resultó más sencillo.

La actuación de Riquelme, a pesar de la derrota azul y amarilla, confieso que no me disgustó. En especial por lo realizado en la segunda mitad. Aclaremos rápidamente: no se trata de una actuación para ponerle un marquito y colgarla en la galería del buen fútbol continental. Pero no fue ni por asomo comparable a las frias participaciones en partidos recientes, como contra San Martín de San Juan, Atlas o Gimnasia.

Tuvo un segundo tiempo con bastante movilidad arriba y generando cierto peligro. No ofició de armador, pero inquietó bastante al area araucana. Un tiro de fuera del área, previo amague a un defensor fue de lo mejorcito de la producción boquense. En otras noches, con más estrellas a favor del equipo de la Ribera, seguramente alguno de estos intentos hubiese terminado en un gol salvador.

Luego llegó la lesión. Quiero aclarar algo. En Riquelmentira he hablado sobre la "lesión fantasma" de este jugador. Esta vez no me parece el caso. La lesión fantasma aparece entre semana, comunicada desde la prensa, y no se ve ningún sintoma en la cancha (más allá de la tradicional frialdad del 10). Esta vez se vió clarito el momento en donde se produjo el tirón. Y antes de que alguién diga algo, me pareció acertada su desición de no seguir. Quince minutos más en cancha de poco hubiesen servido más que para agravar la lesión. Al salir en el momento justo de sentir el tirón, seguramente Friomán estará listo para volver a jugar en breve y aportarle lo suyo al equipo.

En fin, a pesar de la derrota de Boca, lo de Riquelme me pareció positivo. Claro está que si me guiaría por el diario de mayor tirada nacional, me sentiría estafado. Porque allí se dice que el Capitán Frío está entre los cinco mejores jugadores del mundo. Anoche jugo bien. Pero nada más. Y nada menos.

miércoles, 19 de marzo de 2008

La "Era Riquelme"

No voy a hablar del partido de Huracan y Boca porque no lo ví. Así que esta vez no emitiré opinión sobre el desempeño del Capitán Frío, a pesar de que amigos míos me comentaron sobre su apenas discreto desempeño. Pero como no quiero hablar de algo que no ví, simplemente utilizaré este párrafo a modo de aviso.

De lo que si voy a hablar es de un tema mucho más candente, y que atañe a la preocupante e injustificada condición "quasi vitalicia" de Tristelme como líder futbolístico y espiritual en la Selección Argentina.

Durante la denominada "Era Bielsa", muchos futboleros amantes del juego de Friomán, no entendían como este no era convocado por el técnico rosarino. A la vez, comenzaron a remarcar que cada traspié que el seleccionado sufría, se debía a esta controvertida desición. ¡Y vaya si el seleccionado no tuvo un tropiezo en el 2002!

Luego de aquel triste mundial, los riquelmistas y la prensa acrecentaron la presión contra Bielsa y este decidió renunciar allá por 2004. Hasta ese entonces solicitar la presencia del 10 en el seleccionado era una cuestión de gustos. Nobleza obliga, Friomán había hecho méritos dentro de la cancha para vestir la celeste y blanca. Aunque muchos olvidan también, que Bielsa le dió varias oportunidades a este jugador y que en ninguna rindió.

Pero finalmente la llegada de Pekerman inicio la "Era Riquelme" ¿Por qué digo así y no "Era Pekerman" o "Era Basile bis"? Simple: Desde la primavera del 2004, el seleccionado tiene una sola cualidad inamovible. Esta es Tristelme conductor.

Podría haber sido una era gloriosa, pero el juego mostrado en la cancha y los resultados demostraron lo contrario. Hubo dos partidos iniciales de este ciclo que marcaron a fuego lo que vendría. Un inicial 4-2 contra Uruguay en River, con Friomán floreandose y demostrando que su presencia bien podría ayudar a la Selección. Y a los pocos días, un frío empate en el estadio Nacional de Chile, en donde los rojos apretaron un poco en el medio y la albiceleste careció de ideas y de fútbol.

Quedaba evidenciado. Si el trámite se mostraba favorable, este equipo ganaría sin problemas. Si el rival era algo más complicado, ganar se haría difícil. Y esta sería la constante de la "Era Riquelme".

La selección de Tristelme agarró las eliminatorias puntera cómoda y terminó detrás de Brasil. Por primera vez desde que las eliminatorias sudamericanas se juegan todos contra todos, Argentina no las ganó. En su momento se explicó que estaba bien, porque de nada sirve ganar esta clasificación, ya que lo importante era el mundial.

Mientras la albiceleste dejaba el primer puesto a los brasileños, en 2005 jugó la Copa de las Confederaciones. Victorias ante rivales fáciles, empates ante rivales complicados y en la final, 1-4 apabullante ante Brasil. Se dijo inmediatamente que el equipo tenía poco ruedo y que en Alemania 2006 se vería la verdad.

Llegó entonces el ansiado mundial, con un grupo difícil aunque no tanto como el de 2002. Hubo un hecho clave al cual se le dió poca importancia: el choque con Holanda sería en la tercer fecha, con ambos equipos probablemente clasificados. Y así fue. ¿Qué hubiese pasado si estas dos potencias se hubiesen cruzado en la segunda fecha sin nada asegurado?

Lo cierto es que el mediano México costó horrores, y la pobre Alemania nos eliminó por penales ¿Rigayme cómo jugó durante todo el certamen? A poco y nada. Me acuerdo de un lindo tiro fuera del área contra Costa de Marfil; una habilitación a Saviola en ese mismo partido; un corner contra México; y cómo se fue reemplazado en los cuartos de final. Muy poco para la manija del equipo.

Luego de la eliminación llegó Basile y otra paliza de Kaká y compañía, 0-3 esta vez. La madre de Rigayme pidió que no juegue más y entonces comenzó una maniobra para que este tipo vuelva a la Selección. Estaba claro que en el invierno de 2006, hasta muchos tristelmistas ya no lo apoyaban en la celeste y blanca.

Pero el Capitán Frío vuelve entonces a Boca, allí tiene buenas actuaciones que le permiten a los boquenses alzar su sexta Copa Libertadores, y entonces casi por decreto presidencial, Friomán es convocado para la Copa América de 2007, nuevamente como líder futbolístico y espiritual. ¿El resultado? Les ganamos a los fáciles, los medianos nos complicaron y la otra potencia que había en la copa nos despachó 0-3, esta vez con suplentes.

Pero la "Era Riquelme" está lejos de finalizar. En 2008 declaró tener ganas de jugar en Beijing y automaticamente, casi 200 días antes de iniciarse la contienda olímpica, se dió una lista de convocados en la que él no sólo formaría parte, sino que sería el capitán.

¿Qué es lo que me molesta? Simplemente que tengo la sensación de que esta historia ya la viví. Vamos a ganarles a los seleccionados menores, los medianos nos van a complicar y algún gran equipo (¿Brasil de nuevo?) nos va a cachetear a su debido momento.

Tal vez suceda un imprevisto y ganemos. El fútbol tiene esas cosas. Pero estoy cansado de que estemos dependiendo de ese imprevisto que nunca llega, mientras que Brasil, a fuerza de trabajo a conciencia se cansa de ganar.

Tristelme tuvo varias chances y las desperdició todas. Beijing es una nueva, esperemos que no la tire a la basura. Pero por como vienen las cosas, los tristelmistas pueden estar tranquilos. Si perdemos en China, dentro de dos años el helado Capitán Frío tendrá revancha en Sudáfrica ¿O alguno todavía piensa que su presencia está en duda?

domingo, 16 de marzo de 2008

La violencia nos mata a todos

Una vieja máxima dice que "la única verdad es la realidad". Parecería ser que en el universo futbolero este concepto es relativo. Muchas veces, ante la realidad, las discusiones futboleras perduran eternamente. Pero cuando la realidad dice que hay un muerto, se acaba cualquier discusión.

Ayer murió Emanuel Alvarez, un pibe de 21 años, cuando iba a la cancha. No importa de que cuadro era; o que manera de sentir el fútbol tenía; si prefería jugar con enganche o sin él; si era de alentar mucho en las tribunas; si llevaba la camiseta puesta o no. Puedo seguir con una larga lista de etcéteras. Ninguna justifica en lo más mínimo que este muchacho hoy este muerto. Y tan absurdo como injustificado, es el hecho de que este pibe haya muerto por algo relacionado al mundo del fútbol.

A mi me gusta el fútbol, como al 99% de los aficionados, porque entre otras cosas, es un medio excelente para divertirte, sociabilizar, competir sanamente, encontrar amigos (ya sea en los compañeros como en los rivales), debatir, charlar, etc. ¿Cómo puede ser que una cosa tan linda acarreé muerte? ¿Cómo se puede matar por el fútbol?

Hace una semana, luego de que su equipo caiga 0-5 contra su clásico rival, el gran Ramón Cabrero respondió a un periodista que preguntó si ese resultado era un duro golpe para Lanús. "No puede ser un duro golpe -dijo- porque el fútbol no da golpes. La vida es la que está para esas cosas". Cuanta razón tiene Ramón. Y cuanta bronca da ver como un grupo de parásitos se empecinan en contradecirlo a fuerza de violencia y muertes como la de Emanuel Alvarez, que lamentablemente ya no podrá gozar del fútbol como tanto le gustaba. Señores, la violencia en el fútbol nos está matando a todos.

En el próximo posteo espero poder volver a hablar de fútbol y no de barbaridades como esta. Sepan discuplarme.

martes, 11 de marzo de 2008

Hoy leí una nota en el diario Olé que me llamó la atención. Paso a citar alguno de los fragmentos más significativos:


"...Adivina adivinador: ¿quiénes son los jugadores de Boca que más kilómetros recorren en un partido? Hagan sus apuestas que la banca, seguramente, una vez más retirará todo...

[...] Generalmente, los valores que marcan los volantes suelen ser los más altos por una cuestión de campo a cubrir y amplitud de movimientos. Por eso no llamó la atención que los primeros números que acercaron a La Boca mostraran en el podio, con alrededor de 12.000 metros de recorrido, a Sebastián Battaglia y Fabián Vargas. Pero ahí nomás de los peones está Riquelme, con movimiento constante para escapar a las marcas y generar juego..."


Según este informe, Riquelme es el tercer jugador que más corre en Boca Jrs., con un promedio cercano a los 12 km por partidos que hacen Battaglia y Vargas.

Según el INDEC, este verano 2008, los precios de los alquileres de viviendas en la Costa Atlántica descendieron un 20% con respecto al 2007. En Riquelmentira también a ellos le creemos.

Saludos a los amantes del fútbol.

lunes, 10 de marzo de 2008

Qué el árbol no tape al bosque

Riquelme jugó el mejor partido oficial desde su vuelta al club de la Ribera. En una tarde que amanecía complicada para los locales al encontrarse abajo en el marcador, y con la expulsión de Paletta al final de la primera etapa, Boca sacó a lucir toda su chapa de grande y cercó a su rival hasta empatarle.

Es verdad que los de azul y amarillo no se enfrentaban al rojo de Bochini, de Bertoni o de Alfaro Moreno. Jugaban contra el pálido Independiente que siendo puntero en la fecha 10º del apertura con 22 puntos, terminaron 9º con 28. Pero atención ¿Cuántos equipos hoy podrían hacer lo que hicieron los dirigidos por Ischia? Si no fuera por Arsenal y su agónico 3-3 con nueve, diría que en está liga en la que el actual campeón (conservando su plantel) cae estrepitósa y humillantemente 0-5 en su casa ante su clásico rival, ningun equipo sería capaz de esta proeza. Exceptuando a Boca, claro.

Justamente el verdugo del actual campeón -Banfield- sufrió en carne propia esta cualidad de Boca: la de ser capaz de jugar de igual a igual con inferioridad numérica contra quien sea. Los boquenses, los banfileños y los amantes del fútbol recordarán aquella tarde en la que Boca, con dos jugadores menos, se impusó 2-1 ante su rival. En aquel día, Ibarra se irigió como el gran héroe por anotar el gol sobre el final, pero fueron los 9 jugadores en cancha los que dejaron absolutamente todo.

Pasaron apenas unas temporadas y es Independiente ahora quien sufre esta cualidad Boquense. Esta vez Riquelme anota el gol pero nuevamente es el plantel el que acorrala a su rival. Además de Román, sería injusto no mencionar a Palacio (más allá de los goles errados tuvo un buen partido), el sacrificio de Boselli, Dátolo (a pesar de sus siempre firuletes de más), Bataglia, etc. La actitud de Boca fue tan aplaudible, como repudiable la mezquindad de los de Troglio.

¿Riquelme fue el mejor de Boca? Si vamos a centrarnos en quién anotó el gol, no caben dudas. Cumplió con su faceta de armador de juego dando pases interesantes, pateó muy bien (como el 95% de las veces) un peligroso tiro libre, e hizo amonestar a Gioda entre otras cosas. Nobleza obliga, el 10 tampoco tuvo su tarde perfecta. Así como Palacio erró goles, Román dió pases imperfectos, perdió pelotas sencillas en el medio y desapareció por momentos. Pero en el conteó final, su actuación fue positiva para el equipo. Fue un buen partido y si quieren la figura (para mi fue el equipo todo, pero demoslé el gusto a Olé y digamos que él fue la figura).

Ahora, tengo dos cuestiones. Una tiene respuesta, la otra ustedes dirán.

¿Actuaciones como esta justifican la presencia de Tristelme en el seleccionado? ¿Es válido darle a este jugador la "manija" del equipo albiceleste? Lo que hoy hizo Boca, como dije fue comparable solamente con lo de Arsenal. Lo que hoy hizo Román fue comparable con lo que hicieron varios jugadores del ámbito local. ¿Por qué él si y el resto no?

Voy a ser más amplio. Lo que Riquelme hizo hoy fue comparable con lo que vino haciendo Palacio o Palermo en el mismo Boca, pero en partidos anteriores. De nuevo ¿Por qué él si y el resto no? Entonces no tengo dudas: actuaciones como estás no justifican que Tristelme lleve la 10 celeste y blanca en la espalda, de manera casi "vitalicia".

Para la segunda cuestión me abstendré de dar la respuesta ¿Qué pasó con la "lesión" de Román? Si leyeron mi post anterior, habrán visto esto:

"Total, no falta mucho para que aparezca un equipo tibio contra el que este jugador se encuentre inspirado, le meta dos goles y sea elegido figura unánime por la prensa toda. Entonces, ese día la lesión fantasma de Tristelme será archivada hasta que unas cuantas actuaciones grises vuelvan a requerir de sus servicios."

Creo que le erré. No fueron dos goles. Bastó con uno.



Fe de erratas: Pido disculpas a quien lea. La semana anterior Estudiantes dió vuelta el partido contra Danubio, en Uruguay y con uno menos (aunque con siete mil personas rugiendo en las tribunas). No es patrimonio de Boca agrandarse con uno menos, pero eso no quita que sea una cualidad del equipo y que lo del domingo sea bien meritorio.

viernes, 7 de marzo de 2008

La lesión fantasma

Boca le ganó bien al Atlas. Pasó algunos sustos, pero no pasaron a mayores. Le bastó la figura de Palacio, acompañado por buenos desempeños de Caranta, Bataglia, Vargas, Ledesma y Morel. ¿Y Riquelme? No tuvo un buen partido, pero tampoco fue algo malo, como lo que hizo hace unos días en La Plata. Podría decirse que su actuación pasó completamente desapercibida en el trámite del juego. Algo completamente contradictorio, si tenemos en cuenta las maravillas que se cuentan acerca de su siempre trascendente juego.

Pero en el partido -y en la previa- sucedió algo que aquí anticipamos hace unos días. "¿Se viene otra "supuesta lesión" de Riquelme que no le permite jugar con todo su potencial?" preguntabamos entonces, y parece ser que la realidad indica que si. Señores: vuelve la eterna lesión de Tristelme y esta vez la primicia no fue de Crónica, sino nuestra.

Se preguntarán si poseó la bola mágica de cristal que anticipa el futuro, pero rápidamente lo desmentiré. Simplemente tengo memoria y me acuerdo que cada vez que Román acumula actuaciones de mediocres para abajo, la prensa vuelve a sacar este rumor. Repasemos. De cinco partidos oficiales previos, el Capitán Frío tuvo solamente una buena actuación contra Argentinos Jrs. El resto de deslucidas e intracendentes hasta malas.

Más allá de que la prensa intentó rescatar jugadas aisladas para resaltar las actuaciones del 10, el balance de los partidos la contradecia. ¿Cómo explicar más de estos partidos grises? Decidieron utilizar el mismo justificativo dudoso aplicado anteriormente varias veces y con éxito. Tristelme está lesionado y aunque jugará, lo hará a media máquina. De este modo, cualquier partido mediocre será entendible.

El jueves, el diario de mayor tirada nacional publicó en su nota previa sobre el partido, que Román estaba con una molestia. Iniciado el partido, sucedió lo más llamativo. En un cruce en los primeros minutos, Riquelme recibe un roce de parte de un rival. Entonces el 10, con un gesto de dolor bastante duro, se tomó la rodilla. Inmediatamente todos los periodístas de la transmisión televisiva comenzaron a comentar la jugada, mientras se repetía la misma imagen del Capitán Frío tomándose su pierna, una y otra vez. Lo más irónico era que luego de darse esa repetición, se veía a Román trotando sanamente. Como broche de este circo montado, al finalizar el partido, el periodista de campo le pregunta al jugador como estaba de su rodilla, a lo que este le indica que no pasó nada. Algo lógico, si jugó tranquilamente 70 minutos después de ese golpe.

En definitiva, la sombra de la lesión de Tristelme ya está echada. Los medios arrojan rumores, muestran imagenes tomadas de una jugada aislada. El justificativo ya está listo. Friomán puede jugar mal que no es su culpa. Total, no falta mucho para que aparezca un equipo tibio contra el que este jugador se encuentre inspirado, le meta dos goles y sea elegido figura unánime por la prensa toda. Entonces, ese día la lesión fantasma de Tristelme será archivada hasta que unas cuantas actuaciones grises vuelvan a requerir de sus servicios.

domingo, 2 de marzo de 2008

Solo los resultadistas podrían aplaudirlo hoy

Seguramente la prensa propagandística y resultadísta dirá que Boca ganó porque tuvo a un Palermo siempre goleador, un destello de la magia de Román y a un Rodrigo Palacio brillante. Pero como nosotros posteamos lo que vemos, diferimos de esta bajada de línea propagandística.

Boca ganó porque:

  • Palacio demostró una vez más que es el mejor delantero militante en el fútbol local.
  • Qué Gimnasia es un equipo tibio y que no supo traducir en la red sus mejores 20 minutos, cuando tenían un jugador de más.
  • Qué Boca tiene una mística (o culo, según sus preferencias) especial.
Pero hay algo que quiero que quede claro. Si Boca hubiese perdido (como mereció por lo realizado en la primer mitad del segundo tiempo) era por estar con uno menos, y por la inútil actuación de Riquelme. No tocaba una, la que agarraba la perdía y encima se quedaba plantado en la mitad de cancha como si hubiese hecho el desgaste que estaban haciendo sus compañeros para cubrir espacios (Palacio a la cabeza).

Su actuación fue insostenible. Ni siquiera destacando su pase gol a Palacio, que luego fue penal (dejando de lado las incontables diagonales que tira el bahiense para ser habilitado, que son mérito de él y no del 10). Riquelme no mereció quedarse en el equipo en el segundo tiempo más de 5 minutos. El cambio era cualquiera con sangre por él. Pero el fútbol es así, un negocio y este tipo es el que más vende en Boca. Así que se quedó en la cancha, Gimnasia erró 5 goles echos, luego se fue expulsado Leal y el Capitán Frío y Boca zafaron.

En fin, una actuación de las más bajas de Riquelme desde su vuelta, pero que seguramente será rescatada con los resultadístas que lo aplauden 89 minutos parado en la mitad de cancha perdiendo pelotas, con tal de verlo hacer un pase gol a "Mr. te tiro 20 diagonales por partido", o sea, el bueno de Palacio.

Saludos a todos los amantes del fútbol.


PD: ¿Se viene otra "supuesta lesión" de Riquelme que no le permite jugar con todo su potencial?

viernes, 29 de febrero de 2008

Riquelme necesita de Boca para ganar

Juan Román Riquelme nació el 24 de Junio de 1978 en San Fernando, Provincia de Buenos Aires. Su carrera futbolística se desarrolla en Argentinos Juniors, Boca Juniors, Barcelona FC, Villarreal CF y la Selección Argentina de Fútbol (juveniles y mayores).

De sus inicios en Argentinos Jrs. hay pocos datos, ya que defendió esos colores solamente en las divisiones inferiores. Aún en ellas es traspasado a Boca Juniors, donde jugó 168 partidos de liga con 40 tantos, y 54 partidos internacionales con 14 anotaciones, entre los períodos 1996-2002; primer semestre del 2007 y desde 2008 en adelante (tiene un reciente contrato hasta Junio de 2010). Ganaría 3 títulos locales, 2 Libertadores y 1 Intercontinental.

Su primer etapa en Boca se encuentra marcada por la llegada de Carlos Bianchi al puesto de entrenador. Orden defensivo, presión asfixiante al rival y delanteros con gran capacidad de definición eran las característica del plantel. Todo esto sumado a una excelente preparación física y un estado mental netamente ganador, convirtieron a Boca Jrs. en un equipo más que temible.

Sin embargo, tal vez la condición más excepcional de este plantel fue el recambio. En un principio se creyó y se dijo que algunos jugadores eran insustituibles, y que cuando fuesen transferidos al exterior, el buen rendimiento boquense decaería. Pero los años pasaron, las transferencias sucedieron y Boca -con jugadores nuevos- siguió ganando. Quizas podría decirse que el único irremplazable era el propio Bianchi, teoría que se confirmaría con las performances de Boca en 2002, o en 2004/2005. Recién la llegada de Alfio Basile (y con el otra receta futbolística) hizo creerle a los boquenses que no solo Bianchi poseía la fórmula del éxito.

Más allá de esto, los mejores días de Riquelme en Boca se sucedieron justamente en la etapa de Bianchi y allí fue una de las piezas que ayudaron a obtener los palmares citados. Con partidos destacados y otros no tanto, fue clave mientras jugó en el armado ofensivo y en aguantar la pelota cuando el rival "se venía encima". Cuando le llegó la hora de ser transferido se fue, y sin embargo Boca Jrs. siguió cosechando palmares.

La otra etapa de Riquelme en Boca no fue en la "Era Bianchi". Russo era el técnico y el equipo siempre mantuvo un tinte irregular; no obstante, ganó la Libertadores 2007. Permítanme aclarar algo. Este Boca versión 2007 fue un equipo que alternaba destellos de buen fútbol, con momentos completamente deslucidos. El equipo de la Ribera fue justo ganador de la copa, pero quedó la sensación de que si un rival medianamente bueno se enfrentaba, lo hubiese eliminado. Sucedió que no hubo un equipo así y entonces fue un justo ganador. No pasó así en el torneo local. El apenas correcto San Lorenzo de Ramón Díaz tuvo argumentos más que suficientes para relegar a Boca al segundo puesto y así dar la vuelta olímpica.

Muchos hablan de que Riquelme fue la figura estelar de esa conquista copera. Permítanme no coincidir. Mas si me explayara en argumentar esta diferencia me extendería demasiado. Por lo cual seguiré adelante y por lo pronto prometo un post defendiendo la hipótesis antes argumentada.

Barcelona FC no es sinónimo de alegría futbolística para Román. 30 partidos de liga, 3 goles; 11 partidos internacionales, 2 tantos; y un factor denominante: la banca. Primero fue el técnico Van Gaal, que nunca lo quiso en su plantel. Luego su sucesor Antic le reprochó que además de atacar hay que colaborar con los compañeros en la defensa. Finalmente en Junio de 2003 Barcelona FC contrató al holandés Rijkaard. Este observó el buen trato que Riquelme le daba al balón, pero decía que cuando el "Barça" se quedaba sin el balón “es como si el equipo estuviera con 10 hombres”.

Fue cedido a prestamo al Villarreal FC en ese 2003. Allí Riquelme mejoró su performance. 106 partidos con 36 tantos en el marco local y 37 encuentros internacionales disputados con 9 goles. El Villarreal era un equipo del ascenso español que fue financiado en 1997 por el adinerado empresario español Fernando Roig Alfonso. A partir de allí logró el ascenso a primera y una curva creciente en sus rendimientos, producto de las buenas contrataciones que realizaba su apoderado. En ese marco llegó Riquelme al "Submarino Amarillo" y junto a otras estrellas de nivel internacional logró importantes victorias que le dieron el 3º puesto de la Liga en 2004/2005, y alcanzó las semifinales de la Champions League en 2006.

Vaya uno a saber por que, Riquelme creyó -o le hicieron creer- que todos los logros que había alcanzado el club se debían a su rendimiento personal dentro de la cancha. Comenzó entonces a creerse el dueño del equipo, cosa que no agradó ni a su entrenador Pellegrini, ni al antes citado Roig. Comenzaron sus problemas en el club a finales de 2006, motivo por el cual fue cedido a prestamo a Boca Jrs. durante el primer semestre de 2007, y terminó siendo vendido al mismo club en 2008, luego de seis meses de espera por alguna oferta satisfactoria. El Villarreal sigue con su rendimiento creciente, y Riquelme no obtuvo finalmente ningún título en el fútbol europeo.

La Selección Argentina de Fútbol es el equipo que resta citar en donde jugó Román. En primer instancia fue convocado al Sub-20 en 1997 por Pekermán, donde junto a jugadores de la talla de Aimar, Cambiasso o Samuel gana el Sudamericano y el Mundial de Malasia 1997, además del "Torneo Esperanzas de Toulon" al año siguiente. En mayores jugó 42 partidos con 13 goles convertidos.

Su paso por el seleccionado mayor es sinónimo de controversias. Passarella lo convoca en 1997 para las eliminatorias de Francia 1998, pero no lo hace para el mundial. Su sucesor Marcelo Bielsa si lo hace para la Copa América Paraguay 1999, en donde cumple una discreta labor. También es convocado para el preolímpico de Sidney 2000, en una reedición del equipo juvenil campeón de Malasia. A pesar de las espectativas, esta selección queda eliminada humillantemente por Chile. Debido a sus apenas aceptables actuaciones con la celeste y blanca, Bielsa deja de convocarlo y prefiere los servicios de otros jugadores con los cuales conforma un interesante equipo.

Debido a la mala actuación en el mundial de Japón-Corea 2002, la presión sobre Bielsa es cada vez mayor ya que seguía sin convocar al astro boquense. En 2004,luego de ganar el oro olímpico en Atenas 2004, el técnico rosarino renuncia y lo sucede Pekerman. Este suceso marca el retorno triunfal de Riquelme a la Selección, convertido en la manija del equipo. Claro esta que de triunfal no tuvo demasiado que digamos. Se armó un plantel tibio, que cada vez que se enfrentaba a un rival de peso flaqueaba. La Copa de las Confederaciones 2005 fue un aviso de lo que pasaría en el Mundial del año siguiente. En esta oportunidad el equipo fue humillado por Brasil 1-4 en la final. En Alemania 2006 se sabía que a los rivales débiles se les ganaría sin problemas, pero en cuanto el camino cruce a los albicelestes con algún buen equipo, sucumbiría.Justamente los locales (con una pálida selección) eliminarían a los "Pekerman´s Boy" en cuartos de final.

Riquelme renunció por pedido de su madre al seleccionado luego de aquel mundial, pero la prensa presionaría para que vuelva. La Copa América Venezuela 2007 lo volvió a tener como eje del equipo, pero las premisas aplicadas en los años anteriores se mantuvieron, a pesar de que ahora era Basile el director técnico. Nuevamente Brasil humillaría a la Argentina en la final, con un sobrio 0-3. Entonces, Juan Román Riquelme no obtiene ningún título en el seleccionado mayor.

Viendo con atención estos datos se distinguen dos cosas. Primero que no todas las victorias que obtuvieron sus equipos fueron solo debidas a su juego, ni sus fracasos se debieron solamente a su manera de jugar. En posts futuros analizaré puntualmente algunos casos, pero por ahora me contentaré con esta breve aclaración. En segundo lugar queda más que claro que Riquelme pudo dar vueltas olímpicas en un solo lado: Boca Juniors.Alguién podrá objetar esta afirmación recordando los aquí sitados sub-20. Es verdad. Tal vez también omitamos algún torneo de inferiores en la 7º de Argentinos por ejemplo, o en algún club barrial. Pero a nivel profesional y en primeros equipos, solo Boca y nada más que Boca es el equipo en el que Riquelme pudo ganar.

Ahora bien, si tenemos en cuenta un post anterior en este mismo blog en donde se enumera la afición que tiene Boca Jrs. por ganar torneos, queda bastante visible que es este club el que le da a Román el plus que le falta para poder dar vueltas olímpicas. Queda claro que con Riquelme o sin él, Boca gana igual. Pero sin Boca, Riquelme no puede ganar. Claro que queda tiempo para que refute esta afirmación. Sus convocatorias al seleccionado parecen no tener fecha de vencimiento. Eso sí, en Europa parece que ya no tendrá otra chance. Ahí saben bien que Riquelme da vueltas olímpicas con el padrinazgo de una sola camiseta.

jueves, 28 de febrero de 2008

Boca no necesita de una estrella para ganar

Boca Jrs es uno de los equipos más grandes de La Argentina, de Sudamérica y del Mundo entero. De eso no caben dudas. Si alguién las tiene -nublado por el fanatismo, como sería el caso de algunos simpatizantes del archirrival boquense, River Plate, entre otros- aquí van unos fríos números que no dejan el más mínimo margen de duda.

En el ámbito local Boca Jrs. disputó 2820 partidos de la era profesional, iniciando la cuenta el 31 de Mayo de 1931 ante Chacarita Jrs. y finalizándola (por ahora) el 24 de Febrero de 2008 ante San Martín de San Juan.

Ganó 1404 partidos, el primero de ellos el 7 de Junio de 1931, al vencer como local a Quilmes AC 5-1 y cerrando dicha suma el pasado domingo 24 de febrero de 2008, al imponerse de visitante 2-0 ante San Martín de San Juan.

Empató por primera vez el 31 de Mayo de 1931, como local y sin goles ante Chacarita Jrs. Su última parda fue el 10 de febrero de 2008, está vez 1 por 1 ante los rosarinos de Central en Arroyito. En total acumula 757 empates.

Las derrotas suman 659. La última el 9 de diciembre de 2007 en victoria ante Tigre, 2-1 abajo. La primera allá en 1931, el 4 de Junio 3-2 contra Gimnasia LP en la capital bonaerense.

El record boquense representa que ganó el 49,78% de los partidos que disputó; empató el 26,84% y solo perdió el 23,38%. De ese modo ha cosechado en toda su historia profesional la asombrosa cantidad de 3917 puntos. Estos números son superados en el ámbito local solamente por River Plate, y solo Independiente, San Lorenzo y Racing Club ostentan más victorias que empates y más empates que derrotas, aunque por detrás de Boca Jrs.

A la vez, esta performance le permitió al equipo de la Ribera (siempre hablando del ámbito local) ganar 22 campeonatos de los 112 campeonatos disputados. Opacados quedan sus 17 subcampeonatos. Nuevamente solo River Plate supera a su rival en este aspecto.

Pero como todos sabemos, Boca aventaja ampliamente a su rival en el ámbito internacional. Allí solo el Club Atlético Independiente puede hacerle sombra. Sin embargo las últimas victorias hacen de Boca Jrs. el equipo más ganador a nivel internacional de América y apenas superado por el AC Milan a nivel mundial.

Desglocemos esta afirmación. Seis Copas Libertadores (1977, 1978, 2000, 2001, 2003, 2007); tres Copas Intercontinentales (1977, 2000, 2003); tres Recopas Sudamericanas; dos Copas Sudamericanas; una Supercopa Sudamericana; una Copa Masters; una Copa de Oro. Esto nos habla de 17 copas internacionales, dos más que el antiguo Rey de Copa Independiente y que el Real Madrid, pero una menos que el Milan AC.

Además un dato para no despreciar es que Boca Jrs. jugó 20 Copas Libertadores en su historia (la de 2008 es su 21º participación en el máximo torneo continental), por lo cual haber ganado seis significa exactamente el 30% de efectividad. Caben destacar tres subcampeonatos logrados en 1963, 1979 y 2004.

¿Qué nos dicen todos estos números? Qué el Club Atlético Boca Juniors siempre ha ganado títulos a lo largo de su historia profesional. Más aún, que si bien no siempre ganó, la mayoría de las veces peleó por el título con serias chances de hacerlo. Podría añadir muchos datos más. Como por ejemplo que una vez este equipo se clasifico 17º, construyendo su peor campaña del profesionalismo; pero que jamás estuvo en segunda división (honor compartido solamente con Independiente y River). O tal vez enumerar a los artilleros que salieron máximos goleadores en 10 torneos distintos.

Desde Varela hasta Palermo, desde Valentim hasta Maradona, desde Rojas hasta Marzolini, desde Roma hasta Córdoba. Y la lista sigue: Mastrangelo, Varallo, Meléndez, Boyé, Brindisi, Barros Schelotto, Tévez, Marcico, Ratín, Zanabria, Pernía, Palacio. Boca ha sabido tener excelentes futbolístas entre sus filas, que más de una vez supieron defender los colores de la Selección Nacional o la de las selecciones de su país. Y varios de esos jugadores son considerados la crema de la historia del fútbol, como es el caso de Maradona.

Pero lo más fascinante es que muchas de estas estrellas han convivido en los mismos equipos. Boca nunca fue un rejunte de pataduras con un solo jugador que tenía gran habilidad y que salvaba al resto. Boca Jrs. tuvo siempre planteles equilibrados y en donde sobraban jugadores virtuosos.

Evidentemente esto lleva a deducir que a pesar de una mayoría de jugadores que pueden ser considerados desde correctos hasta fenomenales, también han poblado las filas boquenses futbolístas apenas discretos. Basta recordar al limitado lateral brasileño Bahiano; o a aquel exótico centrodelantero nipón llamado Takahara; y más atrás en el tiempo, al impresentable Hrabina (una suerte de carnicero que supo defender los colores azul y amarillo como lateral izquierdo). Todos los equipos -hasta los mejores- tuvieron, tienen y tendrán de estos jugadores de poca monta que sin embargo ostentan bastante gloria, adquirida a partir de haber integrado importantes planteles.

Sin embargo, una vez más la balanza de la historia favorece al equipo de la Ribera. La cantidad de buenos jugadores en sus planteles fue siempre superior al de la mayoria de sus rivales. Quitemos a River Plate, a Independiente, a San Lorenzo y tal vez a Racing ¿Cuántos equipos creen que han compartido a lo largo de toda su historia tantos buenos jugadores? Ninguno. Boca Jrs. siempre ha tenido uno de los planteles más ricos del fútbol local y eso se ve reflejado en los abundantes buenos resultados.

Por eso Boca es uno de esos clubes que pueden darse el lujo de tener a las más grandes estrellas del fútbol mundial, y sin embargo ninguna de ellas opacará su gloria. Lo que hace grande a Boca es su historia, ese hado ganador que supera cualquier influencia temporal de cualquier jugador.

Y basta un claro ejemplo. El admirable Diego Armando Maradona debutó allá por 1976 en Argentinos Jrs. Sin embargo, en casi cinco años de su inigualable aporte, no logró darle a la institución de La Paternal título alguno. En 1981 pasó a Boca y allí si su magia se sumó a la de otros cracks y pudo dar la vuelta olímpica.

En conclusión, todos estos datos, todos estos análisis me permiten llegar a afirmar que Boca Jrs. se encuentra por encima de sus jugadores y no son estos sino el club, con su mística, el que siempre es serio candidato a ganar lo que disputa.

¿Qué cómo logró Boca forjar dicha mística? ¿Con qué medios y a partir de cuándo? Ese es un tema muy distinto que no es el que trata de analizar este post ni este blog. Por lo pronto hoy nos dedicamos a analizar a la fría historia y su resultado ha quedado (al menos eso espero) bastante claro.

*Las fuentes estadísticas fueron tomadas de www.diariodelfutbol.com.ar, de www.afa.org.ar y de www.wikipedia.org.

domingo, 24 de febrero de 2008

Un partido común.

El de hoy ha sido un partido típico en la tarde sanjuanina. Los locales recibían al Boca de Tristelme con la esperanza de sumar tres puntos y seguir en el lote de los punteros, pero por sobre todas las cosas, engrosar su magro promedio. Mientras tanto el equipo de la ribera llegaba al oeste con la obligación de -como siempre- ganar y prenderse en la lucha del campeonato.

En un partido discreto y chato, la visita se valió de la siempre seca pólvora de Palermo para imponerse dos tantos contra cero. Para la estadística quedarán la expulsión de Gómez en San Martín, un tiro en el travesaño de Décima o los tres puntos que se llevó Boca. Pero lo que importa en este sitio es la actuación triste de (valga la redundancia) Tristelme.

Siendo el enganche del equipo, teniendo la responsabilidad de armar el juego ofensivo e incluso de ponerse al mismo al hombro, una vez mas JR no cumplió con las espectatívas. Analicemos los hechos.

-Fue el tradicional partido donde el rival intentó apretarlo levemente y eso fue suficiente para que deje de lado su agresividad en el juego. Con una marca que no podría llamarse de ningún modo intensiva, San Martín logró que Boca pierda a su "timón" ofensivo. Las ofensivas de los xeneises pasaron a manos de los peligrosos Palacio y Palermo (cumplió una labor de pivot interesante a partir de la intrascendencia del 10), y las colaboraciones del resto de los volantes.

-Tristelme dependió del resto de sus compañeros de manera abrumadora. Muchas veces escuchamos la frase que indica que Román es el estratega y que gracias a su "magia" el resto del equipo juega. Este no fue el caso. Este muchacho estuvo oculto, sin hacer casi nada importante para el equipo (salvando algunos pases tibios en el medio que cambiaban el ritmo para hacerlo más monótono) durante el primer tiempo, ya sea empatando o ganando uno a cero. Recién cuando Boca marcó el segundo tanto, se soltó un poco e intentó florearse. Típico de JR. Podemos afirmar sin miedo que su actuación pudo ser considerada solamente intrascendente y no contraproducente contra el equipo, gracias a la correcta performance de alguno de sus compañeros.

- ¿Hasta cuando va a seguir intentando patear los corners para hacer un gol olímpico? Hacerlo de vez en cuando para tomar desprevenido a sus rivales (y aprovechando su muy buena pegada) sería una excelente desición. En cambio practicarlo repetidas veces durante un mismo partido deja de ser sorpresivo y pasa a convertirse en una estupidez anunciada. Más aún, patear el 90% de los corners de esta manera ya es directamente una falta de respeto a sus compañeros, cuerpo técnico, dirigentes, socios, simpatizantes y aficionados boquenses.

Entonces ¿Cómo podríamos calificar la actuación de Tristelme? Sencillamente como trivial. Porque su poca participación en el juego no ayudo a que Boca gané, pero tampoco hizo que su equipo deje de hacerlo. Surgen entonces otras preguntas ¿Puede un jugador tan mentado como Tristelme, al cual se le da el manejo del plantel, aparte de una credencial vitalicia a la titularidad indiscutida en Boca Jrs. y en la Selección, tener actuaciones triviales? ¿Puede un jugador que solamente tiene responsabilidades en el armado del juego ofensivo y a la vez nula injerencia en los aspectos defensivos del juego, desaparecer del juego sin aportar nada trascendente?

Sinceramente yo creo que si. Los jugadores son humanos y no son infalibles. El gran problema surge cuando a este jugador se le adjudican dotes sobrenaturales y por ende estas actuaciones triviales nos hacen ruido. Si fuese el semidios del fútbol que muchas coorporaciones mediáticas intentan hacernos creer, esta actuación sería inaceptable, magra, latosa. Tristelme se empecina domingo a domingo en demostrarnos lo normal que es, pero sin embargo debemos soportar explicaciones que rozan con lo parapsicológico acerca de sus condiciones para jugar este deporte.

Por eso, llegando a la conclusión de este comentario, debemos remitirnos a los hechos que se mostraron en la cancha, ese sitio mágico en donde tiene lugar este deporte y que no sabe de mentiras cobardes. Lugar en donde Tristelme demuestra con sus actuaciones prototipo, que está muy lejos de ser la figura de Boca Jrs. y mucho menos, de vestir la gloriosa (¡¡gloriosísima carajo!!) "Celeste y Blanca".

No mentir es nuestro estilo

Nos, los amigos de la patria futbolera rioplatense, aquella que entiende que el fútbol argentino debe ir siempre al frente y no contentarse solamente con un gol o un resultado positivo aislado, crea este humilde espacio, a fin de aportar datos fidedignos y libres de la propaganda exitista sobre una de las personas que mejor representa la mentira del fútbol argentino: Juan Román Tristelme.

No pretendemos defenestrar en este sitio las abundantes virtudes del hábil enganche argentino. Pero si intentaremos que aquellas habilidades no sean exageradas hasta el hartazgo, ni que se inventen nuevos paradigmas futbolísticos a fin de justificar mediocres actuaciones. Aplaudiremos buenas actuaciones, reprobaremos malos juegos, pero por sobre todo nos enfrentaremos acérrimamente a las sobrevaloraciones efectuadas por el sector más poderoso del periodísmo nacional.

Cabe aclarar que este sitio está construido sin fines de lucro. Las actuaciones de Tristelme no nos dan de comer, como pareciera ser que si lo hace con otras personas o coorporaciones. Nosotros construímos este espacio porque somos "hinchas" del fútbol argentino y queremos lo mejor para él. Vemos en JR Tristelme una figura oscura que a partir de su sobrevaloración mediática, ocupa lugares destacados en la selección y el fútbol local. Desde aquí intentaremos echar un poco de luz sobre sus actuaciones, sin propaganda de por medio, para que aquellos que quieran darle espacio a la razón de la mente y no a la del alma, comprendan como nostros que Juan Roman Tristelme es un buen jugador, pero que ni por broma es tan bueno como dicen.